6 aspectos de tu vida que mejorarás con la práctica de la meditación guiada

Si te digo que la salud y el bienestar son posibles solo cuando te encuentras en el presente, no es novedad para ti, y, sin embargo, cuesta tanto lograrlo. Nos pasa a todos.

De hecho, ¿cómo llevas lo de estar aquí en presente?

Y no me refiero al hecho de estarlo físicamente, porque estar con el cuerpo estamos, aunque tampoco seamos muy conscientes de ello, a menos que algo nos lleve a prestar atención: un golpe, una quemadura en la cocina o un bocinazo al cruzar la calle en abstracción total.

Por lo que te pregunto es por ese estar que es sinónimo de habitar el presente, cuerpo y mente en total presencia.

En el último posteo te hablé de una forma en la que podías practicar de forma diaria este ejercicio de estar en el aquí y ahora, aunque también te prometí que te iba a dar una segunda herramienta para conseguirlo, y de eso va el posteo de hoy.

¿Quieres conseguir calma y conciencia duradera dedicando 15 minutos al día?

Si crees que en tu rutina sería saludable:

Mantener tu mente silenciada, aunque sea por momentos.

Calmar tu cuerpo.

Estar al mando de la voluntad de tus pensamientos.

Y sin ningún efecto secundario, más que mayor paz, equilibrio y armonía. Voy a guiarte a través de una relajación consciente que te sentará de maravilla porque, si ya has experimentado la calma de ir más despacio, ahora ya puedes pasar a meditar para obtener efectos que se mantengan en el tiempo.

Para ello he elegido 2 de los sentidos, como te mencionaba en mi posteo de octubre: el oído y la vista. Sí, la vista para mirar con los ojos cerrados para visualizar lo que con ellos abiertos no ves

Y el oído no solo lo usarás para escucharme mientras te guio a través de la meditación, sino para sentir el compás de tu respiración, que es a dónde llevarás tu atención para observar qué surge en el transcurso de estos 15 minutos de práctica. Sin juzgar, solo atendiendo tus sensaciones.

Verás que es muy sencillo si solo te entregas a la experiencia sin intentar ponerle nombre, ni explicación. 

Al cabo de unas semanas podrás sentir que:

  1. Tienes más conciencia de tu cuerpo, de qué sientes y de qué necesitas.
  2. Cuentas con mayor firmeza en la selección de tus pensamientos, por lo que la mente ya no te arrastrará una y otra vez por su trending topic del día.
  3. Experimentas mayor coherencia entre lo que piensas, sientes y haces.
  4. Vives mucho más tiempo del día en equilibrio, desde tu identidad hasta con todo lo que te rodea o resuena contigo.
  5. Aprecias el silencio y lo sientes cómodo.
  6. Manejas el estrés, las prisas y el tiempo con mayor habilidad, simplemente porque el ritmo acelerado habrá disminuido.

Esto te dará la pauta de que te encuentras más en presente y con ello habrás conseguido estar más saludable.

¿Cuándo es el mejor momento para meditar?

Lo ideal es a primera hora, antes de iniciar tu rutina o a última hora del día. Aunque cualquier momento está bien, si puedes destinar 15 minutos a la práctica y entre 2 y 5 para prepararte e integrar el resultado al final. 

Lo importante es que lo incorpores a tu rutina, no que sea perfecto.

Si te apetece, también es buena idea hacer esta práctica en un instante del día en el que sientas que necesites poner punto final a algo, como la tensión de una reunión o el estrés de una mañana ajetreada. Te servirá para pasar la página y volver a la calma.

Cualquiera sea el momento que elijas, siéntate en una silla o en el suelo en una posición en la que la espalda esté recta para que la respiración fluya, aunque debes cuidar de que no te induzca al sueño. Luego, cierra los ojos para aislarte de lo que sucede afuera.

Al momento de elegir un lugar cuida que te resulte cómodo, familiar, libre de interrupciones y estímulos de cualquier tipo. La idea es que te lo puedas poner fácil.

Y, ya está. Adelante con la práctica.

Vale Lola, empecemos >>

En este audio voy a guiarte durante todo el camino, lo único que tú debes hacer es predisponerte a cerrar los ojos, visualizar y prestar atención a tu respiración.

Algo más antes de que comencemos. Me encantaría que luego me cuentes tu experiencia para poder compartirte otras meditaciones adaptadas a tu experiencia, de hecho, con motivo de mi cumpleaños, he propuesto en mi cuenta de Instagram un concurso donde puedes dejar tu comentario sobre la práctica.

Tienes la posibilidad de ganarte una sesión de terapia biodinámica craneosacral, solo debes compartir tu comentario y estarás participando.